TEATRO

15.05.2014 20:40
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Acebo: "El teatro debe ser para todos, no sólo para eruditos"

15.05.2014

El director Jorge Acebo, en sus puestas "Cuando el tiempo está después" y "Wake up, woman", ambas en cartel, trabaja a partir de situaciones cotidianas e identificables para la construcción del drama porque, opina, "el teatro precisa llegar a todos, sin limitarse sólo a los eruditos".


Acebo es actor, dramaturgo y realizador, y ya viene explorando cuestiones de género desde las tablas hace tiempo, en “Wake up…” revela con valentía las dolorosas entrelíneas de una pareja joven, cuya relación se tiñe de violencia, en una obra necesaria, con funciones a sala llena, los sábados, a las 21 en  Puentes Amarillos (Libertad 1230, CABA).

"El artista es un trabajador, en teatro, hacés la función y ya está. Al finalizar esta obra, las historias que la gente se acerca a contarme son tan intensas -o más- que el texto. No te dejan cortar, como si en este caso estuviera cumpliendo con una misión social, además del hecho teatral”, describe entre emocionado y satisfecho.

La “transformación” de un supuesto príncipe azul en una criatura bestial, eje de la trama, genera un nivel de emoción que persiste más allá de los aplausos y saludos finales y, añade el teatrista, “el público también expresa sus dolores, sus anécdotas de vida a través de las redes sociales."

Cuando las escenas concluyen su devenir, la sala queda a oscuras y otra instancia comienza, el público -integrado por hombres y mujeres en proporciones bastante parejas- se convierte en protagonista con su angustia a cuestas, conversa, abraza a los actores y al director en la puerta de la sala.

La mayoría de los que llegan al teatro parece atravesada por una honda necesidad de desenterrar vivencias, motivados por una puesta decidida a mostrar -sin golpes bajos- los diarios estragos del discurso patriarcal sobre los cuerpos.

Hijos que dejaron de ver a su padre golpeador por años, adultos que reviven pasajes de su infancia y mujeres surcadas por alguna forma de violencia hacia ellas o hacia otras mujeres cercanas, animan una situación frente a la que Acebo indica que "comienza el trabajo de escuchar y contener, tan arduo como el realizado en escena".

Su creador describe al relato como, "explícito, pero lo teatral permanece, los recursos coreográficos, la interacción de los cuerpos de los actores -sin palabras- revela la intensa relación entre los dos, esta obra tiene una energía blanca, te satisface. La gente vuelve a verla, algo que suele pasar con las comedias y no sucede en los dramas".

"Cuando el tiempo está después" -estrenada primero en España con un elenco de ese país- es la otra creación del autor, versión libre del clásico del siglo de oro español, “La vida es sueño”, de Pedro Calderón de la Barca, que ya va por la segunda temporada en el Payró.

De hablar cálido, el dramaturgo admite que “me encanta Calderón; partí del mito fundacional del texto, aquel vínculo donde el progenitor decide criar en cautiverio a su hijo, sostenido en el drama del encierro pero traspolado a la actualidad”.

La localidad bonaerense de González Catán es el espacio elegido para desplegar la trama, “con referencias -identificables- de la obra hispana, aunque quienes no la conocen, no quedan afuera, ya que es la historia de una familia del conurbano porque quiero que el teatro se entienda”, especifica.

El sótano carcelero, una suerte de bastión, parece detener el tempo dramático, pero “si bien el concepto de tiempo podría ser concreto, al llevarlo a la práctica se convierte en relativo. El tiempo en la vida no es para todos igual. La vida puede ser fugaz, disfrutable, irreverente, plena o innecesaria; depende de la sucesión de hechos que la van conformando. La relatividad de lo momentáneo… Para algunos, el tiempo es el ahora, el presente; para otros, el tiempo está después”, concluye.

"Cuando el tiempo está después", con Jorge Diez, Marcela Ruiz, Nicolás Condito, Mariela Rodríguez y Natalia Pascale y las voces de Edward Nutkiewicz, Hilda Bernard y Alejandro Awada, puede verse los viernes a las 21.30 en el Payró (San Martín 766).

"Wake up, woman", con Natalia Pascale y Sebastián García,fue declarada de Interés social y cultural por la Legislatura porteña y cuenta con el apoyo de la Comisión Nacional Coordinadora de Acciones para la Elaboración de Sanciones de la Violencia de Género, dependiente del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos.

La obra sube a escena los sábados a las 21, en Puentes Amarillos (Libertad 1230).